dilluns, 9 de maig del 2011

Radiación: cáncer de tiroides, cataratas, leucemia y otros efectos sobre la salud

Desde el accidente de Chernóbil, son numerosas las investigaciones sobre las consecuencias de la radiación en la población expuesta. En este punto, recordar que el efecto de la radiación se extiendió y se extiende por toda Europa (fueron centros de control de radiación de otros países - Suiza, Suecia, etc.- los primeros en detectar índice de radiación en sus atmósferas superiores a lo normal) por la atmósfera, agua (lluvia y ríos), flujos de fauna y flora, etc.

Algunos de estos estudios vinculan la exposición humana a radiación con enfermedades como el cáncer de tiroides, leucemia, cataratas, cánceres hematológicos e indicios sobre el aumento en el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Johnson, Thomas "La batalla de Chernóbil" 2006

Sanmartín, Gisela "26 d'abril: Vint-i-cinc anys de recerca en salut sobre Txernòbil, què hem après i cap a on anem?" CREAL, 24 de abril 2011

dijous, 7 d’abril del 2011

Amianto/asbesto: nuestras casas son cancerígenas

Baldosas, o azulejos para pisos, respaldos de láminas de vinilo para suelos, adhesivos para instalar baldosas, cañerías de vapor, calderas y conductos para hornos, juntas para puertas de hornos, estufas de leña o carbón, tableros de fibra presada, rociadores aplicados en las paredes o cielos rasos, techos, tejas, enchapados de paredes externas contienen amianto.

El amianto llamado por los antiguos alquimistas como lana de salamandra provoca cáncer de pulmón, mesotelioma maligno (cáncer que afecta la pleura y el peritoneo) y asbestosis (dificultad respiratoria). Presente en muchos de los materiales de las edificaciones donde habitamos, trabajamos y pasamos la mayor parte de nuestras vidas.

Las consecuencias de la inhalación de este mineral pueden manifestarse hasta 50 años más tarde a su exposición. No se han demostrado las consecuencias de su ingestión o del contacto con la piel, pero en personas que han estado en contacto con el amianto, el cáncer de pulmón es 10 veces más frecuente que en el resto de la población.

Los estudios sugieren que respirar asbesto podrían aumentar las posibilidades de contraer cáncer en otras partes del cuerpo (estómago, laringe, intestino, esófago, páncreas y los riñones).

Los síntomas habituales son: pérdida apetito y de peso, el cansancio, el dolor torácico, la hemoptisis o expectoración de sangre y la dificultad respiratoria.

Las empresas que suministran este mineral se escudan en la incidencia del tabaquismo en el cáncer de pulmón para esquivar las acusaciones sobre las muertes a consecuencia del asbesto. Por este motivo, las estadísticas al respecto no son del todo fiables.

Conviene mantener cautela en la inhalación en demoliciones, por ejemplo.

Asbesto, Wikipedia
El amianto: aislante y peligroso, ABCPedia
Todo sobre amianto

dilluns, 28 de març del 2011

Contaminantes en el agua de nuestras casas


Para potabilizar el agua contaminada por residuos orgánicos, se utiliza cloro. De esta desinfección del agua, se generan unos compuestos químicos volátiles (trihalometanos)

Desde que se conoció su existencia, numerosos estudios epidemiológicos han sugerido una posible relación entre la exposición a subproductos de la cloración y efectos perjudiciales sobre la salud humana, como un mayor riesgo de cáncer de vejiga y colorrectal, problemas respiratorios, abortos espontáneos, bajo peso al nacer y malformaciones congénitas.

En Alemania, donde no se cloran las aguas de consumo y donde el agua que se ingiere es embotellada, las tasas en 2000 de cáncer de vejiga en hombres por cada 100.000 habitantes fue de 27 casos. En España, sin embargo, la tasa fue de 44 casos.

La Organización de Consumidores y Usuarios realizó en el 2006 un estudio sobre la calidad del agua de grifo en 50 capitales de provincia. La conclusión más relevante es que las muestras de agua de grifo de las ciudades de Cáceres, Ciudad Real, Zamora, y parte de Alicante, Ávila y Murcia no eran potables por exceso de trihalometanos.

Además el riesgo de exponernos a estos contaminantes nocivos para nuestra salud, no podemos evitarlo bebiendo agua embotellada. Puesto que recientes estudios del Centre de Recerca en Epidemiologia Ambiental (CREAL) concluyen que estos productos químicos pueden ser absorbidos por la piel o inhalados en baños, duchas y/o piscinas públicas.

Gisela Sanmartín "Beber agua embotellada no reduce la exposición a contaminantes del agua" Marzo 2011

Carmen Freire, Ramón Soler, Mariana F. Fernández, Cristina M. Villanueva, Joan O. Grimalt, Nicolás Olea "Valores de trihalometanos en agua de consumo de la provincia de Granada, España" Gac Sanit v.22 n.6 Barcelona nov.-dic. 2008

Organización de Consumidores y Usuarios"Atención, agua no potable" OCU-Compra Maestra 302, Marzo 2006

dimarts, 15 de març del 2011

La contaminación del aire causa siete veces más muertos que los accidentes de tráfico


Sinc (11/02/11)

Al menos 16.000 personas mueren de forma prematura por culpa de la contaminación en España, según estima el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM). Esta cifra multiplica por siete a la de fallecidos en accidentes de tráfico en 2010. Los niños, ancianos, enfermos crónicos o con patologías cardíacas son los colectivos más vulnerables a este problema ambiental.

“La comunidad científica no tiene dudas respecto a los efectos perjudiciales de la contaminación sobre la salud respiratoria y coincide en la necesidad de reducir la contaminación urbana”, explica Cristina Martínez, coordinadora del área de medio ambiente de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).

Según datos del MARM, la contaminación que se registra en España produce 16.000 muertes prematuras, una cifra siete veces mayor a la de fallecidos en accidentes de tráfico en 2010. El año pasado 1.710 personas perdieron la vida en las carreteras. En el conjunto de la Unión Europea (UE), la cifra se eleva a 370.000 muertes debido a la mala calidad del aire.

(...) Las partículas en suspensión, originadas por la combustión de los motores de los vehículos, “producen un efecto agudo que acelera la muerte de personas con un estado frágil de salud”, advierte Martínez. En su opinión, los niños, personas mayores, enfermos crónicos, o pacientes con patologías cardíacas son las personas “más vulnerables” a esta contaminación urbana.

Las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), procedentes de las grandes instalaciones de combustión, causan problemas en el tracto respiratorio y producen irritación e inflamación. “Los niños y los asmáticos son los más afectados”, subraya la experta.

Muertes que se podrían evitar

Otro estudio europeo, que incluye a Barcelona, Bilbao, Madrid, Sevilla y Valencia, revela que si los niveles de estas partículas contaminantes suspendidas en el aire (inferiores a 2,5 micras) se redujeran a 20 partículas/microgramo por metro cúbico, en cada ciudad se evitarían 11.375 muertes prematuras, es decir, 8.053 muertes por patologías cardiopulmonares y 1.296 por cáncer de pulmón.

Desde la SEPAR alertan de que los niveles -de entre 100 y 150 microgramos por mililitro de NOx- alcanzados en algunas ciudades españolas durante los últimos días exceden los 40 microgramos necesarios para proteger la salud.

dimarts, 8 de març del 2011

Bombillas de bajo consumo


En el post de Mi Estrella de Mar , se citan los peligros del uso de bombillas de bajo consumo extraídas de la entrevista "15 PREGUNTAS FRECUENTES SOBRE BOMBILLAS DE BAJO CONSUMO Y SALUD (por el profesor Rodríguez Farré, investigador del CSIC y de la UE)"

Las bombillas de bajo consumo contienen cinco miligramos de vapor de mercurio. Los productos con mercurio en estado metálico se retiran del mercado debido a su toxicidad (sólo es tóxico si nos lo tragamos). En cambio, las bombillas de bajo consumo contienen vapor de mercurio fácilmente inhalable si se rompen.

El vapor de mercurio se acumula en el organismo y se va eliminando muy lentamente. Puede tener efectos sobre el sistema nervioso central, especialmente en niños.

Por otro lado, las bombillas de bajo consumo emiten radiaciones ultravioleta que pueden tener efectos sobre la piel y la retina sobre todo en su uso a corta distancia (lámpara de mesa, por ejemplo)